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Por este acuerdo, además, el monoplaza de Alpine, reconocible por su color azul, pasará a llevar también el color rosa de BWT, para difundir el mensaje de sostenibilidad y responsabilidad en todo el mundo. «El color rosa simboliza la misión de BWT de ‘Cambiar el mundo, sorbo a sorbo’ y hacerlo mejor cada día mediante la implementación del concepto Bottle Free Zone», expresó el comunicado. El vicepresidente de marketing y ventas de Alpine, Cédric Journel, insistió en que las agendas de sostentabilidad de Alpine y BWT están «completamente alineadas con la eliminación de los plásticos de un solo uso». «Nos complace unir fuerzas para convencer a muchas personas en todo el mundo para que reduzcan los desechos plásticos. Paralelamente, utilizaremos la enorme plataforma global que proporciona la F1 para apoyar a BWT en su lucha contra la distribución injusta de agua potable limpia, segura y saludable«, recalcó. Por su aprte, el CEO de BWT, Lutz Hübner, se mostró «orgulloso» de formar parte del equipo BWT Alpine F1 como su patrocinador principal. «Con nuestras tecnologías de tratamiento de agua únicas y patentadas y el gran seguimiento global de Alpine, podemos ayudar a «Cambiar el mundo, sorbo a sorbo«. La primera etapa será crear zonas libres de botellas de BWT en todas las fábricas de Alpine y en las carreras. La unión de fuerzas para aumentar la concienciación, así como para luchar por la sostenibilidad, alinea perfectamente a BWT y Alpine», destacó. «Además, BWT ha estado invirtiendo durante más de dos décadas en el desarrollo de membranas para nuestra futura economía impulsada por hidrógeno. Mientras tanto, somos uno de los principales proveedores mundiales de membranas para la producción de hidrógeno verde y de membranas para pilas de combustible, el convertidor de energía del siglo XXI. Junto con nuestros nuevos socios, contribuiremos a las carreras libres de emisiones y la movilidad eléctrica sostenible con celdas de combustible», explicó.

Paul Millsap también llega a Philadelphia, de donde salen Seth Curry y Andre Drummond. Las últimas horas del cierre de mercado fueron el momento del traspaso más importante de la temporada en la NBA. Los Nets enviarán a los Sixers a James Harden y Paul Millsap a cambio de Ben Simmons, Seth Curry y Andre Drummond, que abandonan Philadelphia para reforzar a uno de los candidatos al título. La operación se completará con dos elecciones de primera ronda del draft. Harden, elegido MVP de la temporada regular en 2018, venía reclamando en las últimas semanas algún tipo de traspaso, aunque su entrenador Steve Nash, había negado de forma más o menos contundente esta opción. Pese a sus 22,5 puntos, 8,0 rebotes y 10,2 asistencias por partido, el escolta no parecía encontrar su sitio en Brooklyn junto a Kevin Durant y Kyrie Irving. En Philadephia podrá reunirse con Daryl Morey, el ex general manager de los Houston Rockets, con quien mantiene una fluida relación. La mejor oportunidad para ambos había llegado en 2018, cuando el equipo texano cayó en las Finales del Oeste ante los Warriors en el séptimo partido, disputado ante su público (92-101). De este modo, los Nets, que temían perder a Harden a final de temporada a cambio de nada, se refuerzan con Simmons, uno de los mejores defensores de la liga. El australiano había mostrado desde el inicio de la temporada su deseo de abandonar los Sixers, donde se le había señalado como máximo responsable de la eliminación en segunda ronda ante los Hawks, el pasado junio. Tras aquella derrota en el séptimo partido, el tres veces All-Star fue criticado por Joel Embiid y su técnico, Doc Rivers. Este curso, el gran estado de forma de Embiid, que viene promediando 29,4 puntos, 10,9 rebotes y 4,3 asistencias en 42 partidos, ha contrastado con la situación de Simmons, que no disputó ni un solo minuto por el mencionado conflicto con su propio equipo.